miércoles, 1 de febrero de 2017

El salto de la perspectiva estructuralista a la dialéctica en didáctica de la lengua

A quienes sois expert@s en Didáctica de la Lengua, en relación a esta síntesis sintética: mi intención no es simplificar el recorrido histórico de esta área de conocimiento, sino situar el debate.

Si bien en la enseñanza de lenguas se han experimentado metodologías diversas los últimos 50 años, las perspectivas que hay tras esas metodologías no han cambiado apenas. Actualmente, son dos las perspectivas que compiten y se entrelazan: la perspectiva gramatical y la perspectiva comunicativa.
  • Según la perspectiva gramatical, la lengua es un código, que tiene una estructura, y la lengua se aprende enseñando esa estructura. Se toma la oración como unidad (morfosintaxis) y generalmente se propone la realización de ejercicios a modo de entrenamiento. Es una perspectiva conductista y la evaluación se apoya en el binomio correcto/incorrecto.
  • Según la perspectiva comunicativa, la lengua es una herramienta de comunicación, así que la gramática de la oración no es suficiente (ni necesaria en muchos casos) para asegurar la comunicación. Toma como unidad el texto, su comprensión y producción, y se trabaja la gramática del texto. Es una perspectiva constructivista y más compleja que la perspectiva gramatical, ya que, además de la competencia lingüística, propone desarrollar la competencia sociolingüística, la estratégica y la discursiva. Los criterios de evaluación se refieren al objetivo comunicativo, la coherencia, la cohesión y la fluidez, junto con la corrección y la riqueza lingüística.
Después, cada perspectiva propone sus metodologías: inductiva/deductiva, funcional, audiovisual, pragmática, basada en contenidos, secuencias didácticas, basada en tareas, en proyectos...

El problema es que ambas perspectivas tienen un gran límite: ambas son estructuralistas. Claro, la perspectiva comunicativa es más amplia y tiene una visión más abierta de la comprensión y la producción, pero también toma la lengua como una estructura, en este caso, una estructura textual. Esto supone que, por muy buena que sea la metodología que se nos ocurra, seguimos en el mismo error: plantear que las lenguas se desarrollan en torno a una estructura y que, además, esa estructura puede organizarse en pasos para su aprendizaje (programaciones, secuencias, curriculums...).
Fuente de la imagen: emaze.com

Perspectiva dialéctica

En las perspectivas estructuralistas, es la propia lengua el centro de atención, y los hablantes tienen que utilizarla de forma apropiada, siguiendo parámetros preestablecidos. Desde la didáctica de la lengua, es suficiente con enseñar esas estructuras de forma ordenada. Es así como se homogeneiza el uso de la lengua.

En cambio, en la perspectiva dialéctica, l@s hablantes se consideran sujetos de la comunicación, sujetos individuales y sujetos colectivos. Más importante que comprender el mensaje es que la gente se comprenda. Esto no significa que 'todo valga', pero se reconoce que la lengua la construye toda la gente de forma colectiva, apoyándose en el pasado y en los saberes individuales y colectivos por medio de la repetición creativa.

Desde la perspectiva dialéctica se comprende la lengua desde su complejidad, lo que significa que los pensares, los sentires y los haceres están entrelazados, no se separan. Al igual que la teoría de la complejidad está siendo cada vez más reconocida en el campo científico, está comenzando a aceptarse que la lengua no puede ser comprendida sin tener en cuenta la incompletitud, la incertidumbre y la imperfección. Hay cada vez más evidencias de esta complejidad, como pasa, por ejemplo, con casos de problemas neurológicos que afectan al habla (ver, como ejemplo, este artículo en inglés de la mujer que podía escribir pero no leer).

Todo esto significa que, en lugar de programar a priori, deberíamos pasar a trabajar con y desde el alumnado, dando respuestas construidas colectivamente que vayan en armonía con el entorno social y natural en el que nos encontramos, flexibilizando estructuras y trabajando la comunicación desde una perspectiva multidimensional, en la que la lengua se utilice junto con otras herramientas de comunicación: expresión plástica, física, afectiva, racional... (pensar/sentir/hacer).

Pizarra creada en la asignatura Didáctica de la Lengua en noviembre de 2016 (UPV/EHU)